Entrevistamos a Laia Blanco, Export Specialist de CoMark, que ayuda a empresas españolas a relocalizar su producción
Laia Blanco, Export Specialist en Co.Mark, nos explica su experiencia con proyectos de reshoring, así como su trayectoria en China como gestora de compras. Un reciente informe de Boston Consulting Group confirma que el número de empresas que han llevado a cabo la relocalización de su producción ha aumentado en un 250% desde 2012. Co.Mark España ha experimentado un aumento en su contratación de proyectos de relocalización por pymes estos últimos años, con clientes que tienen como objetivo aumentar su flexibilidad en entregas de pedidos y reducir complejidad logística.
¿Se están llevando a la práctica hoy proyectos de reshoring?
Sí, por supuesto. Ahora mismo en Co.Mark estamos gestionando proyectos que implican traer la producción a España y a otros países europeos. El reshoring, también llamando onshoring, no implica traer toda la producción integralmente, sino que las empresas pueden decidir traer una parte de ella. El objetivo de todas las empresas a las que apoyamos es el mismo: diversificar la producción y disminuir el riesgo que implica disponer de toda la producción en países asiáticos.
Tu viviste el proceso contrario, empresas españolas que querían producir y/o comprar en países asiáticos.
En efecto, durante 5 años gestioné el proceso de compra de empresas europeas en China, que buscaban aumentar su competitividad. Dicen que China, o te encanta o la odias, yo soy de las de la primera premisa. Durante mi estancia allí, tuve la oportunidad de trabajar e inspeccionar personalmente decenas de fábricas chinas para multitud de productos.
Mi trabajo consistía en buscar el proveedor adecuado, negociar las condiciones de compra y realizar controles de calidad antes, durante y después de la producción para garantizar que la mercancía que se cargaba en el barco cumplía con lo exigido. China es un país lleno de oportunidades, pero al mismo tiempo repleto de dificultades. Yo he vuelto más resiliente, pragmática y empática.
¿Qué razones han llevado a las empresas a iniciar procesos de reshoring?
Son muchos los factores: el aumento de precio en logística, fluctuaciones en tipos de cambio de divisas, incremento del coste de la mano de obra en China, inestabilidad económica y política… También hay otras razones, como la falta de flexibilidad, la complejidad logística, los tiempos de envío adicionales. Todos estos factores se han visto agudizados por la pandemia, obviamente, y las empresas españolas han visto la relocalización de su producción como una solución viable, puesto que en estos momentos la diferencia en costes no es tan elevada y el riesgo es menor. Además, permite a las empresas reaccionar de forma rápida a los cambios de demanda de los clientes, lo que es importante en un mundo cambiante como el que vivimos.
¿Qué industrias están llevándolo a cabo?
Todo tipo de industrias, hemos gestionado proyectos para empresas de inyección plástica, fabricantes de equipamientos para colectividades, fabricantes de dispositivos GPS para gente mayor, fabricantes de robótica, entre muchos otros sectores industriales y tecnológicos.
¿Qué recomendarías a una empresa que se está planteando una relocalización a países desarrollados?
Les recomendaría aprovechar la cercanía tanto geográfica como cultural, y buscar un socio que también vea esta nueva alianza como un proyecto a largo plazo. Se trata de encontrar un socio que pueda aportarte una respuesta rápida, tiempos de producción y entrega más cortos y esa flexibilidad que estás buscando.